Papá, ya han pasado 8 años de tu partida
de este mundo terrenal. Han pasado muchos días y horas sin tu presencia, sin tu lucha,
sin tu amor. Por órdenes de la represión fascista, un 19 de Abril tu vida fue cegada… pero la diste para ser punta de lanza de un Ecuador más justo… Ahora allí
hay un pueblo consciente y un Presidente que ha estado a la altura de tu lucha.
Yo, tu hijo, desde Venezuela, tierra
Bolivariana en revolución, sigo con tu legado de amor, de lucha y de conciencia.
Hace poco partió una persona que también ha influenciado mucho en mi vida y
que también, al igual que Tú, marcó pauta en mi ser y conciencia revolucionaria: Hugo Chávez, un gran líder y amigo, que al igual que Tú se preocupó por
aquellos sin voz, por los olvidados y juzgados por una sociedad desigual, donde los indígenas, los afrodescendientes, los pobres, siempre fueron olvidados. Él, como Tú, rescataron su voz e hicieron
que se gritara a los 4 vientos la justicia e igualdad necesaria en nuestros pueblos Latinoamericanos.
Hace pocos meses también partió otra
luchadora, mi amada y bella Mamita Inés, otro hermoso y tierno ejemplo de
vida. Y cuando la acompañaba a su ultima morada se acercó a nosotros un niño no
mayor de 9 años y me dijo: “Por qué la gente buena siempre es la que
muere?” Me dejó frío aquella reflexión
de un niño inocente… con aquella verdad tajante… por qué siempre son los
buenos, los justos, los que luchan por la vida, los que tienen sueños, los que
tienen la tenacidad de levantar fuerte la voz en contra del opresor… son ellos,
los justos, los que siempre prematuramente nos abandonan.
¿Injusto? Sí… lo es… Pero eso no mermará nuestra fortaleza de
seguir batallando todos los días y construir un mejor lugar para nuestros
hijos. Todas aquellas buenas personas que nos han dejado prematuramente, por la
mano asesina de los opresores, aquellos que solo buscan el bienestar de pocos y
el olvido y la miseria para el pueblo… ¡NO VOLVERAN!
Tu muerte -mi amado Padre- NO
FUE EN VANO. Tu vives cada día más! en la sonrisa y belleza de tu querida Sami,
en la inteligencia y hermosura de tu Sisa… en la humildad y fuerza de tu amada
Charito… En el amor y lucha de tus hijas Marisol, Paola, Janny y Gabriela... En
la conciencia y ejemplo de lucha de quien fue tu compañera, mi madre Irma; en
la sabiduria de tu amigo y hermano Renato, que aún llora cada 19 de Abril tu
prematura partida…
Vives en mí, tu hijo… que lucho y sigo adelante en el camino de la revolución, por el amor y la justicia. Tu muerte no fue en vano mi amado Padre… Defenderemos los principios y valores que sembraste con tu amor en nuestros corazones.
Vives en mí, tu hijo… que lucho y sigo adelante en el camino de la revolución, por el amor y la justicia. Tu muerte no fue en vano mi amado Padre… Defenderemos los principios y valores que sembraste con tu amor en nuestros corazones.
TE AMO JULIO GARCIA ROMERO, TE AMO CON
TODO MI SER!
Y CUANDO LLEGUE MI MOMENTO DE PARTIR, SE QUE ESTARAS ALLI PARA
ABRAZARME. ETERNAMENTE ¡TE AMO!
Bruno García H., Caracas, 19 de abril de 2013.