a cada rodeo, a cada zapateo.
El piso tiembla y reclama por esos piés que lo hacen vibrar.
Las miradas se mezclan al son de su melodia
y los pañuelos logran vuelos imposibles de imitar,
mientras dos jóvenes bailan orgullosos
nuestro baile nacional.
Dedicado a mi abuelo Julio García Romero.
"Abuelo, los tres piés de cueca que bailé y con los cuales obtuve el tercer lugar en el Concurso Regional de Cueca
estuvieron dedicados a ti.
Me siento orgulloso de ser tu nieto.
Con cariño,
Carlos Rosas García"
Con cariño,
Carlos Rosas García"